A menos que hagas algo – Dinero de Alto Desempeño Parte 1
Hay una frase que está por todas partes: “Lo mejor está por venir”, entiendo claramente que su propósito es brinda esperanza, que sigamos adelante aunque la situación sea complicada va a mejorar.
La premisa es buena, el problema es que para que nuestra situación mejore tenemos que poner de nuestra parte, tomar decisiones, esforzarnos, movernos y es cuando las perspectivas de futuro serán más alentadoras.
A una de mis amigas, a quien le di consultoría de negocios, siempre le pasaban cosas que afectaban su economía. Como empresaria sus ingresos no eran fijos y basaba su operación en el hecho de que sus proveedores le financiaban la materia prima cada mes. Si había baja en las ventas, si su personal le dejaba botado el trabajo, si el clima no era el óptimo, pues tenía que batallar para pagarle a sus proveedores y tener algo de ganancia.
Claro que había meses increíbles en su negocio y entonces reaccionaba comprando boletos de conciertos, aviones, buenos hoteles, para liberar ese estrés de los meses malos, quedando como siempre en ceros para iniciar el siguiente ciclo.
Recientemente estuve en Querétaro impartiendo la conferencia “Dinero de Alto Desempeño” donde hablé de los pasos para superar situaciones como la de mi amiga, aquí te comparto el primer paso.
Era claro que lo que mi amiga debía cambiar era su perspectiva acerca de quien ejercía control sobre sus dinero, no era culpa de sus proveedores, las subidas de precio, el clima o sus trabajadores que no tuviera suficiente a fin de mes, sino que ella no estaba tomando las riendas de sus finanzas.
Nadie más que ella era la responsable de su economía y nadie sino ella era la que tenía que hacer algo para que su situación mejorara. La guié para hacer un plan financiero para que tuviera salvaguardas cuando sus empleados incumplían, poder de negociación con sus proveedores y un fondo de contingencia para cuando las ventas bajaban (además de las estrategias de marketing y capacitación en ventas para tener mayores ingresos claro).
Entendió que la única forma en que habría un cambio en su situación no dependía de que sus clientes pidieran más, sus empleados fueran ejemplares o sus proveedores le dieran descuentos o condiciones preferentes, era ella quien tenía que tomar acciones precisas y contundentes, lo cual hizo.
Después de 3 meses de ejecución supervisada, su situación dio un giro de 180°, gracias a ello cuando sucedió la crisis sanitaria de 2020 (su negocio tuvo que cerrar porque sus principales clientes le surtían a las escuelas), pudo salir adelante a pesar de todos los meses de cierre y empezar con el pie derecho cuando reabrió.
Al igual que ella harás bien en analizar a quien le has estado echando la culpa de tu mala situación financiera, acaso es tu jefe que te explota por muy poco dinero, que el gobierno no hace lo necesario, que estamos en crisis económica y por eso no puedes prosperar, o que simplemente has dejado que factores externos tomen las riendas de tu dinero.
Es el momento perfecto para que tomes la decisión de transformar tu propia situación financiera, de hacer lo necesario para gastar eficientemente, hacer una planeación estratégica, generar mayor potencia económica, si no lo haces, nadie lo hará por ti.
La buena noticia es que no tienes que hacerlo solo, al igual que mi amiga me contrató como su consultor, se abre la oportunidad de que por mucho menos de lo que cuesta una consultoría personalizada, te lleve de la mano a entender cómo has jugado el juego del dinero y tener una estrategia hecha a la medida de tus necesidades para que tengas toda la prosperidad que has deseado.
La mala noticia es que no lo puedo hacer por ti, tú debes tomar acción en este momento, aparta ahora tu lugar en el workshop Decode the Money y atrévete a tomar las riendas de tu economía, ahí te veo.
— J.