Regularmente leo los artículos que ciertos divulgadores financieros elaboran dando noticias de último momento, valuaciones de empresas, información posiblemente relevante de mercados financieros y otras curiosidades que ponen por ahí (incluyendo comerciales de sus productos o de sus patrocinadores).
El día de hoy una noticia llamó mi atención acerca de la inflación y la política monetaria en México. La inflación parece disminuir, pero la subyacente aumentar, por lo que puede que no haya recortes de la tasa de interés de referencia para cuidar la estabilidad económica del país.
Lo que terminó de convencerme de compartir todo esto fue la encuesta que hizo al final, ya que comentó que el limón es uno de los productos de la canasta básica que más han aumentado de precio, la pregunta fue: “¿Has sentido un aumento en el precio del limón”.
Como normalmente no hago compras, o si las hago no me fijo en los precios, pues contesté que ‘no’, aunque ayer que compré los tacos para la cena me di cuenta que ya les subieron el precio, ¿acaso tendrá que ver con que haya subido el limón?
Hasta el momento en la encuesta con 36 votos, el 64% lo ha sentido y opina que está carísimo, el 36% opina que no lo ha sentido, o sea que quizá patrocinar su newsletter quizá no sea tan buena idea. Ya que parece que solo una tercera parte de la audiencia lo suficientemente comprometida como para votar parece dar muestras de educación financiera (¿qué no de eso se tratan sus artículos?).
El análisis interesante (que compartíamos en nuestra comunidad) es que un enfoque práctico para no sufrir estos extraños designios del mercado (como que te suban los tacos $5, e incluso así me dieron bien poquitos limones) es generar tanto dinero como para que no se sientan estos aumentos.
La capacidad que, cualquiera que se entrena financieramente, se debe tener es generar potencia financiera de tal modo que los gastos básicos representen un porcentaje irrelevante de nuestro ingreso y poniendo los excedentes a producir más dinero.
Explicar el efecto completo es un poco complejo, sin embargo, quédate con que sería muy ventajoso, si es que sentiste el aumento que dejó carísimo el limón, que obtengas nuevas fuentes de ingreso y que esos ingresos puedan aumentar igual que el limón.
Conocer esto más identificar con claridad tus patrones de gasto, las habilidades básicas para generar más dinero, crear mecanismos para multiplicar tu dinero y estrategias personalizadas a tu situación es lo que abordaré en el workshop exclusivo presencial que tendra lugar en noviembre en Ciudad de México, así que si estás listo para que los aumentos de precios no te afecten enterate de todos los detalles aquí.
Más allá de las consideraciones filosóficas y las opiniones encontradas entre varios “expertos” divulgadores financieros, vayamos directo a los números,